La vendimia a primeras horas de la madrugada permite una mejor maceración en frío, a temperaturas que rondan los 14ºC durante unos 4 ó 5 días. A partir de ahí empieza la fermentación alcohólica de manera controlada y marcada por varios procesos de delestage en su fase inicial. El tiempo de encubado total llega a alcanzar los 25 días. Sin prensado de la uva, el vino pasa directamente a barricas de roble francés, donde realiza la fermentación maloláctica y en las que permanecerá para su crianza un mínimo de 6 meses.
